Junio 2, 2022 | Consejos, Sin categoría,
Los cuadros y ornamentos que colocamos en los muros de nuestros hogares pueden llegar a vestir el espacio incluso más que el mobiliario.
Los cuadros pueden hacer que tus habitaciones no terminen donde comienzan los muros, sino que a partir de los muros, se expandan.
Puedes generar todo un discurso y una personalidad a través de la curaduría del arte expuesto en tu casa.
En este artículo te compartimos algunos tips para colocar tus cuadros de la mejor manera.
– Preséntalos en la pared antes de perforar
Primero que nada, junta todos los gráficos, fotografías, dibujos, paisajes, tejidos y objetos que estés con ganas de colocar a la vista. Agrúpalos según sus rasgos. Puedes hacer grupos por color o grupos por tema.
Por ejemplo, atrapa sueños blancos y máscaras de madera para la habitación más pequeña, ilustraciones irreverentes para el pasillo de la entrada, blanco y negro para el pasillo hacia las habitaciones, temas azules para la habitación principal, rojos y cerámicas para la estancia.
Una vez elegidos los grupos sabrás cuánto espacio necesitas y podrás ensayar la disposición de cada cuadro.
Normalmente este trabajo es más fácil de realizar cuando se realiza entre dos o más personas pues mientras unos mueven los cuadros por el muro los otros pueden apreciar desde la distancia cómo se miran mejor.
– Usa una cinta métrica
Una vez decidida la disposición, saca la cinta métrica y el nivel, si tienes uno. Procura no colocar clavos o instalaciones confiando solamente en la apreciación de tu ojo a no ser que lo que buscas en ese muro particular sea una proyección desordenada o lúdica.
Si tus cuadros van en línea, traza una horizontal con el nivel y mide las verticales desde el techo hacia abajo. Si vas a colocar un cuadro protagónico en el centro de la habitación, mide el muro, haz la división y marca el centro con un lápiz.
Una vez proyectada la instalación puedes ir por los clavos y el martillo o bien, el taladro y las brocas.
– Identifica el tipo de pared en donde colocarás los cuadros para escoger bien tus clavos, taquetes y herramientas
Observa que no todos los objetos necesitan de un taquete y un tornillo para mantenerse estables. Algunos objetos ligeros tendrán suficiente estabilidad con un clavo pequeño o incluso con cinta doble cara o clavos adherentes que ni siquiera dañará tu muro.
Existen paredes de yeso, plafones falsos, muros de concreto, existen muros atravesados por vigas de carga de concreto o de metal.
Toca los muros con los nudillos como haces al tocar la puerta, escucha el tipo de resonancia que tienen para determinar su densidad.
Algunas veces conseguirás instalar clavos de concreto con un martillo, otras veces necesitarás de un taladro para conseguir atravesar, incluso un taladro puede no ser suficiente si tu broca no es la correcta.
También puedes encontrarte con la dificultad de muros demasiado blandos o que se desmoronan. En estos casos puedes optar por instalar desde el techo con hilos o tensores, dependiendo el peso que vayas a colgar. Existen opciones maravillosas que se utilizan por ejemplo en edificios históricos que están protegidos y donde está prohibido perforar el edificio.
– Aprovecha la luz natural
Nunca nos cansaremos de darte este consejo. La luz natural es el mejor amigo de los arquitectos y los interioristas. Saber aprovechar la luz es un arte que no solamente te permitirá ahorrar energía eléctrica, también hará mucho más natural y armónica la sensación de estar en un espacio.
Al elegir los muros donde colocar tus cuadros observa la disposición de la luz. Una luz directa puede quemarlos o incluso anularlos. Si tienes un muro que recibe el rayo de sol, puedes experimentar dejarlo sin objetos y jugar solamente con el tono de la pintura o incluso formas en la pintura.
Los cuadros normalmente van mejor en paredes que reciben la luz de manera indirecta o en muros que no reciben ninguna luz, volviéndose ellos mismos la luminosidad y personalidad de un sitio que antes se sentía plano.
Te deseamos claridad y dinamismo en la visión de tus decorados. No hay mejor sensación que la de amar estar en casa.
