Agosto 29, 2022 | Inversión,
La plusvalía como factor a la hora de decidir
Gabriel Alejandro Moreira
Elegir una propiedad como principal parte del patrimonio familiar es un proceso que nos entusiasma e ilusiona muchísimo, lo que hace que en ocasiones decidamos más con la emoción que con la razón.
Es esa emoción la que nos puede hacer que consideremos solamente factores como la estética, las dimensiones y las características de la misma, pues, como se dice, de la vista nace el amo.
Sin embargo, existen otros factores súper importantes que se deben tomar en cuenta a la hora de escoger.
Por eso es que en esta ocasión hablaremos en primer lugar de la plusvalía, que no es otra cosa que el “aumento de valor de algo”, y que en este caso se refiere a cómo se comportaría en el futuro la fluctuación del precio de nuestra propiedad.
De ahí que sea muy importante que –además de las características principales de la casa– pongamos atención a aspectos como la ubicación, la cercanía de planteles educativos, parques, accesos, servicios, zonas comerciales existentes y la proyección de crecimiento de servicios futuros en la zona. Ese entorno, una vez consolidado a través de los años, genera sin lugar a dudas un incremento en el valor, que por consecuencia aumenta el precio de tu propiedad.
En segundo lugar, hablaremos de otro factor que es más tangible desde el momento de la elección de la compra y que nos ayuda a asegurar mayor plusvalía de nuestra casa respecto a otras. Es el hecho de que nuestra casa se encuentre en un fraccionamiento que cuente con casa club equipada y/o alberca en el desarrollo, pues dichos equipamientos aumentan la propuesta de valor del lugar y, además de hacerlos más atractivos y hasta emocionantes, incentivan no solo el aumento paulatino del valor de la casa, sino también aspectos como la convivencia, el desarrollo en comunidad, la recreación, el tiempo en familia, etc.
El fraccionamiento donde esté tu casa puede también servir como herramienta de atracción en caso de que por alguna razón quisiéramos vender la propiedad a alguien más, ya sea para conseguir la siguiente meta familiar –una casa más grande, o hasta quizá una más chica dependiendo del momento familiar–, o bien por el hecho de considerarla como una inversión que pueda ir siendo cada vez más alta.
Por eso te puedo decir que, si está dentro de las posibilidades, siempre es una buena elección decidirse por una casa con equipamientos adicionales de este tipo, ya que garantizan una mejor y creciente plusvalía, así como una vivencia del lugar más cordial, confortable y funcional.
Espero que estas reflexiones te ayuden a elegir de la mejor manera y te permitan agregar algunas consideraciones importantes a tu elección, y sobre todo que disfrutes al 100% tu nueva casa.
