Noviembre 23, 2023 | Estilo de Vida,
Hugo Martínez
La tendencia humana de personalizar todo lo que tenemos es inobjetable. Aun cuando ahora existen tendencias minimalistas, siempre habrá un toque personal que hace que el espacio que frecuentemos lo queramos vestir de nuestras preferencias.
La Navidad siempre es la excusa perfecta para decorar a nuestro modo nuestra casa, ya sea por cuenta propia o con la familia. Y es un buen momento para compartir y dejar fluir nuestra creatividad y nuestra ilusión por las fiestas, reuniones y ese significado especial que cada quien tiene para estas fechas.
A lo largo de los siglos han existido un sinfín de estilos decorativos que se han ido adaptando a las regiones por el clima, las costumbres, religiones, tradiciones o necesidades económicas. Sin embargo, siempre hay algo que en particular nos atrae y nos distingue y eso suele ser replicado a tu vida diaria y en tu hogar. Tomemos como ejemplo una persona sobria, introvertida, ordenada y que busca tener cierto control sobre sus actividades o acciones. Es probable que en su casa cuente con una pulcritud envidiable, decoración limitada o nula, pocos artefactos expuestos, quizá con tendencia al minimalismo como forma decorativa y de vida.
En algunas ocasiones nuestro salario no nos da para comprar muchos artefactos decorativos como quisiéramos o nos gustaría expresar; pero eso no debe significar un límite para nosotros, ya que contamos con muchos recursos disponibles, desde descuentos en tiendas como materiales de segundo uso.
Tampoco significa que vayamos a dejar esta oportunidad especial de revestir nuestro hogar, ya que incluso al momento de colocar ese toque, uno va cambiando su forma de sentir la casa para comenzar a sentirla como un hogar. Esto nos ayuda a sentirnos más cómodos dentro de ese entorno, pues estamos creando un lugar seguro y conocido para nuestra mente, un espacio de expresión cual lienzo para el pintor, en donde podemos expresar cualquier idea o sensación y plasmarla en las paredes, elementos decorativos como luces, esculturas, figuras, etc.
Hay ocasiones que uno, al ingresar a un lugar desconocido, percibe cierta incomodidad por el espacio y el diseño interior, pues choca con las pautas o paradigmas de nuestra forma de expresar nuestro entorno exterior. Es por eso que todo elemento arquitectónico y de diseño influye directamente en nuestras emociones y en cómo vivimos nuestro día a día.
La Navidad suele representar viviendas con decoración interior y exterior tan espectaculares que la gente puede incluso acudir en masa al otro lado de la ciudad solo para ver, fotografiar o grabar un tiktok o un reel de una buena decoración; por lo que te invitamos a que dejes volar tu creatividad y expreses ese sentir interno de una manera sana en donde los colores y las texturas puedan ser combinados con tal maestría que tu yo interior se sentirá cómodo, fluido y comprometido con tu hogar.
