Mayo 30, 2020 | Consejos,
Cómo mantener fresca tu casa
Además de algunas medidas básicas –aislar el techo con poliuretano espreado recubierto con aislante-impermeabilizante, ventanas de doble vidrio y tener aire lavado o refrigeración con mini-splits–, hay cotidianas y muy simples acciones a la mano que no requieren de inversión alguna y que deberían ser un hábito en el hogar
Isabel Zamora
Llegó la temporada cálida y, con ella, el problema que tienen muchas casas: hace tanto calor que no quieres estar dentro. Con la pandemia a las puertas, estar horas en un hogar caluroso puede ser un martirio.
Aquí te dejo unos consejos para que tu casa sea más fresca sin necesidad de invertir en un aire acondicionado y su mantenimiento.
Mantén cerradas las cortinas y las persianas.
Muchas personas creen que si abren las cortinas de par en par entrará más aire a sus hogares. Sin embargo, hasta un 30% del calor acumulado en los hogares proviene de las ventanas, por lo que crear un ambiente de sombra dentro de la vivienda hará que ésta sea más fresca.
Abre las ventanas según la hora del día.
Recuerda abrir tus ventanas por la mañana y por la noche. De esa forma se llenará tu hogar de aire fresco para aguantar las horas del mediodía, que es cuando hace más calor.
Mantén puertas cerradas.
Contrario a lo que muchas personas piensan, mantener las puertas abiertas no es la mejor solución para ventilar tu casa. Recuerda cerrar las puertas de las habitaciones que no estén en uso o de las que les incida sol directamente, pues eso evitará que el calor se reparta por tu vivienda.
Cambia las sábanas.
Mudar la ropa de cama siempre da un aire de frescura a una habitación y de renovación de ambiente. Procura usar algodón en esta época de calor, ya que esta tela permite la transpiración y se mantiene fresca.
Reduce las fuentes de calor.
Evita tener la televisión, el centro de juegos o la computadora encendidos al mismo tiempo. Si puedes, apágalos. Esto además ayudara a reducir tus facturas de luz.
Cambia las luces.
Sustituye todas tus lámparas por luces led. Las bombillas incandescentes convierten el 90% de la energía que consumen en calor…y no consumen precisamente poca. Notarás la diferencia tanto en la temperatura de tu hogar como en tu recibo de luz.
Mantente con hidratación.
Como principio fisiológico, el calor ocasiona que sudemos para disminuir la temperatura corporal por el cambio de fase al evaporarse el agua. Ello ocasiona que perdamos agua y nos podamos descompensar al alcanzar alguna fase de deshidratación. Por eso no olvidemos mantenernos hidratados y evitar ropa ajustada y calzado cerrado. Con esto notaremos una diferencia enorme. Y aunque esto acaso no contribuya a que la casa esté fresca, sí es una condición fundamental que incide en nuestra sensación de frescura y en el real bienestar de nuestra salud.
Estos son algunos consejos tan simples como efectivos que harán que tu casa se mantenga fresca.
