Diciembre 2, 2020 | Sin categoría,
La casa de tu propiedad que has anhelado por años es más que sólo eso: es un verdadero castillo para ti y para los tuyos. Ahora, más que nunca, resulta muy fácil acceder a tu crédito Infonavit. Infórmate al detalle en el Instituto o con un asesor inmobiliario certificado.
Susana Jeffery
No cabe duda que no puede haber dos reinas en un solo castillo.
–Mamá, te amo. Soy muy feliz contigo. Siempre vamos a estar juntas.
¡Qué recuerdos de infancia!
Pero tenemos que enfrentarnos a la realidad. Eso fue ayer.
Hoy, por favor y por el bien de todos, debo ir por mi castillo, en el cual reinaré con mi pareja hasta que la muerte nos separe.
–¡Recórcholis! ¡caracoles! ¡Oh! Y ahora ¿quién me puede ayudar?
–¡Yooo! ¡El Infonavit!
–¡Qué suerte tengo de contar con este apoyo! ¿Y qué debo hacer para tener mi casa propia?
–Es muy sencillo. Si ya trabajas y tu patrón te paga con regularidad tus cuotas del Infonavit, acércate a quien más confianza le tengas y checa tu puntuación.
–¿Mi puntuación? ¿qué es eso?
–Debes acumular 116 puntos para que tengas derecho a elegir una casa digna para ti y tu familia. Esto lo puedes lograr si tienes de 18 a 24 meses continuos trabajando, con Seguro Social y, según tu sueldo y tu edad, el Infonavit te da puntos.
–¿Puedo elegir la casa que yo quiera?
–¡Donde tú quieras! Pero de acuerdo a tus posibilidades económicas. Hay que buscar la mejor opción para ti y tu familia. Recuerda que vas a estar ahí hasta que la muerte los separe… o hasta que tangas una mejor oportunidad y cambies de casa. Además el Gobierno Federal te puede apoyar con un subsidio en interés social para que puedas completar el total de tu vivienda.
–Y ¿cómo lo pago?
–El subsidio es gratis. Gratis. No tienes que pagar nada. Únicamente te tienes que preocupar por tu deuda en el Infonavit y las obligaciones que con ella adquiriste.
–¡Ah! ¡Ya me vi! En este mismo momento voy a buscar un castillo, el mejor de todos. ¿A dónde puedo ir?
–Busca la mejor opción: fraccionamiento pequeño, de preferencia privado, que esté bien ubicado, que tenga casas muy, pero muy bonitas, con parques, escuelas, centros comerciales, transporte… En fin, tú sabrás tomar la mejor decisión para hacerte de tu casa propia.
–¡Ya sé! Voy a buscar a…
–¡Felicidades! Llegaste a casa. ¿Dónde más?
