Abril 6, 2020 | Sin categoría,
Una como adulta o madre de familia cree que su casa es el lugar más seguro del mundo. Lo sería, salvo que todas, en el día a día, cometemos descuidos pequeñísimos que hacen la diferencia y exponemos sobre todo a nuestros hijos pequeños. Lee estos 10 consejos mínimos que te pueden resultar de utilidad para hacer conciencia en ser cuidadosos en grado extremo y prevenir accidentes en casa
Rocío Vasconcelos
1.- Al cocinar en la estufa coloca los mangos de las sartenes hacia adentro, que no sobresalgan y así evites que estén cerca de la pasada y alguien pueda moverlos. Pueden producirse quemaduras por los alimentos calientes o el agua hirviente, con consecuencias muy graves para todos, pero sobre todo en niños pequeños.
2.- Si estás cocinando y la sartén prende fuego, pon una tapa encima para ahogar la llama, pero no se te ocurra arrojar agua o hacer aspavientos con trapos o cartones, pues podrías ocasionar que la llama se extienda, se desborde y se salga de control.
3.- Evita dejar cuchillos o cualquier utensilio con filo –abrelatas, aspas de licuadora, trinchador o brocheta, por ejemplo– al alcance de los más pequeños del hogar.
4.-Si percibes fuerte olor a gas, no enciendas interruptores eléctricos ni cerillos o encendedores: una chispa podría provocar un flamazo o una explosión. Ventila primero la casa, y luego indaga la causa, que puede ser un quemador abierto o una fuga en algún lado.
6.- No utilices aparatos eléctricos mientras estás en la ducha o dándote un baño. Incluso no metas tu celular, pues las gotas minúsculas pueden afectar su mecanismo.
7.- Mantén el suelo de la sala o la recámara libre de cables, cajas y otros objetos con los que alguien pudiera tropezar.
8.- Si tienes niños pequeños en casa, coloca tapas de seguridad en los contactos eléctricos. Los peques son curiosos y muy dados a meter en las tomas lo que sea, y una descarga –aunque sea de 110 voltios, y con mayor razón si hay sistema de 220 en casa—puede ser fatal si andan descalzos, o sudados o mojados.
10.- Evita, en la medida de lo posible, encender veladoras en habitaciones cerradas, ni tampoco las coloques cerca de ventanas o cerca de sillones, camas o cortinas.