Octubre 11, 2023 | Sin categoría,
Evelyn Sánchez
Cuando el espacio de clóset escasea y, sí, tener un vestidor es un sueño pero no está al alcance de cualquiera… ¡nos surge el eterno dilema de cómo guardar la ropa en casa para mantenerla en perfecto estado!
Nos gastamos dinero en ropa, alguno más que otro… Pero es algo que utilizamos a diario, que requiere dedicarle un tiempo y que ocupa espacio en casa.
Como expertos en almacenaje, ¡vamos a ponerle fin a la ropa desordenada en tu hogar!
Para empezar, escoge el lugar donde la vas a almacenar.Tanto la que utilizas a diario en casa, como la ropa de temporada que guardas hasta que llega su momento. Es necesario tenerla a mano y, si es posible, a la vista.
Procura limpiar ese espacio o escoger uno lo más accesible y limpio posible. ¡La ventilación es muy importante!: el peor enemigo de tu ropa es la humedad. Consejo: haz filtro, y si hay ropa que no has utilizado durante el verano o el invierno pasado, dónala a alguna asociación o recíclala.
Lava tu ropa antes de guardarla. Sí. Es muy importante. Incluidas mantas, colchas y edredones. Y si ya están limpias, tiéndelas para airearlas y pásales la aspiradora. Si algunas requieren plancha porque las vas a colgar, lo mismo. Intenta que huelan lo mejor posible y que estén perfectamente secas cuando las vayas a organizar.
Encuentra el almacenaje ideal.Para esa ropa que vas a guardar sin ponerte, utiliza cajas de almacenaje, arcones, cajones extraíbles para colocar debajo de muebles. Lo importante es que ese espacio se adapte a tus abrigos, tus camisetas, tus cajas… y que sea extremadamente práctico.
Maximiza el espacio.Siempre cajas antes que bolsas. Además de que se apilan, se llenan y se etiquetan mejor. Tu ropa no se arrugará, y ahorrarás espacio.
Protege toda tu ropa de polillas e insectos.Distribuye bolsas especiales antipolillas en todos los compartimentos que organices: cajas, bolsas, percheros o fundas de ropa. Será una maravilla encontrarte tu ropa con un fresco aroma… y sin sorpresas ni agujeros.
Tus mantas, colchas o edredones a raya.Siempre ocupan el máximo volumen en nuestro hogar y además las usamos de media de 6 a 8 meses. Te recomendamos que las almacenes en bolsas de plástico al vacío. Así reducirás notablemente el espacio que ocupan y las protegerás a la vez.
Sábanas, fundas de almohada o toallas.El objetivo es reducir espacio, por lo que es primordial que estén correctamente dobladas, planchadas y apiladas. Si son de fibras naturales, te recomendamos que las almacenes en bolsas de lino o cajas de plástico o madera.
Alfombras.Siempre llévalas a la tintorería antes de guardarlas. Algunas tintorerías u otras empresas incluso ofrecen el servicio de guardártelas durante los meses de verano. La forma ideal de almacenarlas es siempre enrollándolas y enfundándolas en algún filme, y cuanto más grueso, mejor. Consejo: recuerda evitar polillas, humedad y contrastes de temperatura.
Separa y etiqueta bien tus zapatos.Si quieres que no se estropeen las fibras, ni se deformen, ni se manchen, el mejor lugar donde almacenarlos es un zapatero. Primero deberás limpiarlos bien y, si es posible, aplicarles grasa o alguna crema de protección o hidratante. Si almacenas botas o botines es importante que los llenes con papel a ser posible de seda (no periódico, que podría dejar restos de tinta)
Bolsos, pañuelos, cinturones… ¡a guardar complementos!Lo mejor son las cajas. Y si quieres ser el rey o la reina de la organización, tomar fotos de qué va en cada caja, imprimirlas y pegarlas en el frontal de cada caja. O bien, hacer una lista descriptiva del contenido de cada caja.
¿Qué te ha parecido?
Vamos a poner en práctica estos consejos y a dejar tu casa hecha un pincel… ¡Venga!
Si encuentras un poquito de espacio para almacenar, reduces dentro de lo que ya tienes y te alías con uno de nuestros espacios, ¡el éxito está asegurado!
